Sintió un escalofrío, inesperado, repentino... y temió lo peor, su sombra había desaparecido... por suerte, cuando consiguió armarse de valor y mirar, seguía ahí, observándolo, oscura, paciente, como estos últimos días...
lunes, 28 de enero de 2008
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1 comentario:
A veces casualidad y percepción se mezclan y nos hacen sentir...
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